Hungría se promocionará en Termatalia 2022 como el gran destino termal de Europa Central y uno de los más importantes del Mundo, no en vano su capital, Budapest, es la ciudad con mayor potencial termal. La participación de este país se materializa a través de la presencia como expositor de su oficina oficial de turismo Visit Hungary.
Incluso los romanos conocían los poderes curativos del agua termal de Hungría, que yace latente en las profundidades de la tierra como un tesoro líquido en un orgulloso 80 por ciento del territorio del país y burbujea a la superficie en más de 1500 manantiales en todo el país. Solo Japón, Islandia, Italia y Francia pueden reclamar más recursos subterráneos de agua termal. Hoy en día, más de 200 spas termales, 34 balnearios certificados y hoteles de bienestar utilizan los efectos beneficiosos del agua y el lodo curativos.
Hungría se considera con razón el destino de salud por excelencia en Europa Central. Médicos y terapeutas excelentemente capacitados ofrecen curas terapéuticas, servicios de prevención y recreación, así como bienestar médico. Las aguas curativas, que están enriquecidas con numerosos principios activos, se utilizan, entre otras cosas, en el tratamiento de enfermedades del sistema musculoesquelético, en terapias para enfermedades de la piel, trastornos de la mujer y lesiones deportivas.
Ninguna otra capital del mundo tiene tantas aguas termales con temperaturas que van desde tibias hasta los 77°C como Budapest. Una visita a la metrópolis no está completa sin darse un chapuzón en uno de los 15 magníficos baños termales, resplandecientes en esplendor arquitectónico. Los otomanos crearon los primeros oasis de bienestar a fines del siglo XVI. Alrededor de ellos hoy se encuentran otros hermosos baños, construidos principalmente en el siglo XIX y renovados en los últimos años para preservar su tradición.
Un millón de visitantes al año, el 80 % de clientes habituales y cientos de miles de personas curadas: las cifras del lago termal de Hévíz, el lago curativo biológicamente activo más grande del mundo, cuya superficie de 4,4 hectáreas está cubierta de agua rosa y violeta rosas, hablan por si solas. El balneario que hoy conocemos data de 1795, se ha ido desarrollando a lo largo del tiempo gracias a los conocimientos adquiridos desde entonces, y es hoy una marca registrada de la localidad.