Con 437 asistentes de diferentes países de América Latina, el seminario online Ushuaia todo el año, organizado por INPROTUR y la Secretaría de Turismo de la Municipalidad de Ushuaia, generó gran expectativa en los profesionales del turismo de la región.
No hay una estación puntual del año para visitar Ushuaia. La capital de la Provincia de Tierra del Fuego, Antártida e Islas del Atlántico Sur, conocida como la Ciudad del Fin del Mundo, es definitivamente un lugar para vivir y disfrutar de enero a enero.
Bajo esa premisa, el Instituto Nacional de Promoción Turística (INPROTUR) y la Secretaría de Turismo de la Municipalidad de Ushuaia organizaron la semana pasada el webinar Ushuaia todo el año para profesionales del turismo de América Latina.
La magia del Fin del Mundo es tan poderosa que dicho seminario online marcó un nuevo récord de audiencia: casi 440 asistentes de Uruguay, Paraguay, Bolivia, Chile, Perú, Colombia, Ecuador y México dijeron presente con el objetivo de promover el destino argentino en los respectivos mercados.
Con alrededor de 70 mil habitantes, Ushuaia es sinónimo de paisajes impactantes y, sobre todo, de mística. Además, tiene el privilegio de ser la única ciudad argentina trasandina, ya que se encuentra del otro lado de la Cordillera de los Andes.
La idea de Ushuaia todo el año apunta a que este maravilloso centro urbano, el más austral de Argentina, cuenta con una agenda preparada para todo tipo de gustos.
Si se piensa en verano, con las temperaturas más cálidas, la ciudad se presta para caminarla y para gozar de la luz solar entre 18 y 19 horas. Resulta sumamente curioso degustar una centolla o merluza negra –emblemas de la gastronomía fueguina- en un cena con el sol como testigo.
Del otoño muchos afirman que es la época ideal porque la ciudad se viste de colores intensos, con una vegetación pulcra y brillante.
El invierno es un capítulo lleno de encanto y emoción. La montaña y las calles se cubren de un manto blanco producido por la gran caída de nieve. Desde julio hasta octubre, aproximadamente, miles de viajeros llegan al Cerro Castor, ubicado a 20 minutos de la ciudad, para practicar esquí y snowboard, entre otras actividades.
Finalmente, con la primavera reaparecen los colores y en octubre comienza la temporada de cruceros a la Antártida. Ushuaia es la puerta principal para realizar esta travesía única en el mundo.
Por supuesto no se pueden obviar los clásicos: el Tren del Fin del Mundo junto al Parque Nacional Tierra del Fuego, la navegación por el Canal Beagle hasta el Faro Les Eclaireurs o la visita el Museo del Presidio, entre otros.
“Quien viene a Ushuaia va a volver”, aseguran los fueguinos. Indudablemente, tienen toda la razón.