No se trata de un simple ‘bondi’, un ómnibus público en desuso. Sino de algunos acondicionados que responde al estilo ‘tini house’, simple, animalista y con todos los lujos para ser cómodamente habitables . Esta idea corresponde a dos emprendedores mendocinos que pensaron en el turismo, y se ubica en una concurrida zona de bodegas.
Se trata del Bondi Lodge, una iniciativa que se ubica en Vistalba (Luján de Cuyo) y está destinado al descanso y al disfrute en familia.
Cómo surgió el “Bondi Ladge”
Muchos creativos se inspiraron con ideas nuevas durante la pandemia y Jano Montilla y el arquitecto Fausto Omati, no fueron la excepción.
Estos dos jóvenes emprendedores comenzaron a explorar la idea de tener una vivienda propia a bajo costo y de bajos tiempos de construcción. Algo difícil de proyectar actualmente en nuestro país.
“Sumando esa idea a nuestra actividad principal de administración de alojamientos turísticos, nos pusimos en marcha y resolvimos que los autobuses salen de circulación por ley y se desechan como chatarra, aunque su estructura permanezca en buenas condiciones podían ser una buena opción”, remarcaron ambos.
Por lo que pensaron en hacerlos funcional y reacondicionarlos para que sea cómodamente habitables. El resultado fue La construcción de un complejo de 3 viviendas multifuncionales con las siguientes características:
- Miden 30 metros cuadrados cada una
- Presentan un estilo minimalista
- Son de costo considerablemente menor que una vivienda convencional
- Con mínimo impacto ambiental, aprovechamiento y reutilización de recursos, a partir de colectivos en desuso que rompe con la norma social establecida, entre otros.
- Además,
- Cuenta con un jardín con plantas autóctonas y xerófilas alimentadas por riego por goteo
- Con piscina
- Espacio de recreación pergolado
- Y churrasqueras
- “Puede albergar a huéspedes de todo el mundo y que estos vivan una experiencia de vacaciones única, durmiendo dentro de colectivos en desuso transformados en tiny houses de lujo”, describieron los emprendedores.
Por la originalidad de estos alojamientos temporarios, únicos no convencional, con comodidad, el servicio y la experiencia, los desarrolladores buscaron que sean verdaderamente memorables y enriquecedores, marcando la diferencia en los detalles.
“Poniendo en valor nuestro logro de haber reducido significativamente la huella de carbono a comparación de los métodos convencionales de construcción, adaptándonos a la provincia donde estamos y optimizando la utilización de diferentes recursos”, contaron los jóvenes.